Dia 4 Jueves 9 de Enero

“Mi Actitud Frente al Saber, Retener, y Poner en Práctica.”

Nelson Láinez

Mateo 7:24-27 (LBLA) 24 Por tanto, cualquiera que oye estas palabras mías y las pone en práctica, será semejante a un hombre sabio que edificó su casa sobre la roca;

25 y cayó la lluvia, vinieron los torrentes, soplaron los vientos y azotaron aquella casa; pero no se cayó, porque había sido fundada sobre la roca.

26 Y todo el que oye estas palabras mías y no las pone en práctica, será semejante a un hombre insensato que edificó su casa sobre la arena;

27 y cayó la lluvia, vinieron los torrentes, soplaron los vientos y azotaron aquella casa; y cayó, y grande fue su destrucción.

Jesús concluye el gran Sermón del Monte y sus seguidores están maravillados de su enseñanza! Pero Él sabía que, al regresar a sus casas, muchos iban a continuar con la rutina diaria y olvidarían inmediatamente todo lo que oyeron. ¡Seguramente eso te ha pasado más de alguna vez!

Por eso, Él nos dice que para ser sabio no es suficiente con solo oír sus palabras. Es necesario retenerlas y luego ponerlas en práctica. Sigamos el ejemplo del hombre sabio, que aprendió a:

Oír:

Cuando escuchamos su Palabra, nos llenamos de conocimiento espiritual. Ya no estamos ciegos, confundidos y atemorizados frente a los problemas. Las historias y enseñanzas bíblicas nos llenan de fe y esperanza. ¡Ahora conocemos sus promesas y sabemos todo lo que le agrada a Dios!

Retener:

Para no olvidar nunca sus Palabras, debemos permitir que lleguen a nuestro corazón y nos transformen. Esto se logra haciendo una pausa en nuestro día para estar a solas con Dios y meditar en lo que hemos leído y escuchado de Él. La Palabra de Dios tiene que confrontar, estremecer y cambiar nuestras vidas. Dejemos que el poder de su Palabra penetre en nuestra alma, y que ilumine nuestro interior para ver todo lo que está mal, y que limpie y santifique nuestro ser.

Poner en Práctica:

¿Cómo se práctica la Palabra de Dios? Se practica haciendo cambios en nuestra manera de ser, pensar y vivir. Dejando de hacer lo malo (pecado), y practicando la justicia y el amor al prójimo. Doblegando el orgullo y la ira, y también perdonando a los que nos han ofendido.

Acción del día:

Luego de meditar en su Palabra hoy, pídele al Señor que te muestre qué cosas es necesario cambiar en tu vida, y que te dé la oportunidad de ponerlas en práctica, para crecer y madurar en la fe. Además, pídele sabiduría para enfrentar los nuevos desafíos y dificultades que pueden venir en este nuevo año.

Lectura adicional: Santiago 1:22-25